¿Cómo jugar Steam en Linux?

¿Alguna vez te has preguntado si puedes jugar a tus juegos favoritos de Steam en Linux? Pues sí, es posible. Y no solo eso, sino que cada vez es más fácil hacerlo. Reconozco que antes era un lío, pero ahora Steam funciona de maravilla en la mayoría de distribuciones Linux. Olvídate de tener que usar Windows solo para jugar. Con Linux puedes tener lo mejor de ambos mundos: un sistema operativo libre y potente, y acceso a miles de juegos.

Lo primero que necesitas es instalar Steam. En la mayoría de distros Linux populares como Ubuntu, Linux Mint o Fedora, es tan fácil como abrir la tienda de aplicaciones y buscarlo. Le das a instalar y listo. Si no lo encuentras ahí, puedes descargarlo directamente desde la web oficial de Steam. Una vez instalado, solo tienes que iniciar sesión con tu cuenta y empezar a bajar juegos.

Compatibilidad de juegos en Steam para Linux

Ahora bien, ¿funcionan todos los juegos de Steam en Linux? Pues no, pero cada vez son más ¿eh?. Valve, la empresa detrás de Steam, ha puesto mucho esfuerzo en mejorar la compatibilidad. Han creado una capa de compatibilidad llamada Proton que permite ejecutar juegos de Windows en Linux.

¿Cómo sabes si un juego es compatible? Fácil, normalmente en la página del juego en la tienda de Steam verás si tiene soporte nativo para Linux o si funciona con Proton. Sólo tienes que fijarte en la compatibilidad.

Si un juego no funciona de entrada, no te rindas. Hay trucos que puedes probar. Por ejemplo, puedes activar las versiones beta de Proton en las opciones de Steam. O buscar en sitios como ProtonDB, donde la comunidad comparte consejos para hacer funcionar juegos problemáticos. A veces basta con cambiar un par de opciones para que un juego que no arrancaba funcione de lujo.

Rendimiento y optimización

¿Y qué tal va el rendimiento? Pues depende del juego y de tu hardware, claro está. Pero en general, los juegos nativos de Linux van igual de bien que en Windows. Con los que usan Proton puede haber algo de pérdida de rendimiento, pero cada vez menos. Valve está siempre mejorando Proton, así que el rendimiento mejora con cada actualización.

Un detalle que igual ya sabías, pero para sacar el máximo partido a tus juegos en Linux, asegúrate de tener los drivers de tu tarjeta gráfica actualizados. Si tienes una NVIDIA, instala los drivers propietarios. Con AMD suele bastar con los que vienen por defecto. También puedes probar herramientas como GameMode, que optimiza automáticamente tu sistema para jugar.

Comunidad y soporte

Una de las mejores cosas de jugar en Linux es la comunidad. Hay un montón de foros y grupos donde puedes pedir ayuda y la gente es muy maja, siempre dispuesta a echar una mano. Si te atascas con algo, seguro que alguien ha pasado por lo mismo y te puede ayudar. Además, contribuir con tus propias soluciones y experiencias ayuda a que Steam en Linux sea cada vez mejor para todos.

No todo es perfecto, claro. A veces te encontrarás con juegos que simplemente no funcionan en Linux, o que tienen problemas de rendimiento. Pero te puedo decir que son cada vez menos. Y la satisfacción de jugar en un sistema operativo libre y personalizable compensa con creces esos pequeños inconvenientes.

Más allá de Steam: otras plataformas y emuladores

Steam no es la única opción para jugar en Linux. Hay otras tiendas como itch.io o GOG que ofrecen juegos compatibles con Linux. Y si te va lo retro, los emuladores funcionan que es una maravilla. Puedes montar una máquina de juegos clásicos brutal con Linux y emuladores como RetroArch.

No se si me he explicado bien, pero jugar en Steam con Linux es más fácil que nunca, si tienes toda la información. Solo tienes que instalar Steam, elegir tus juegos y ponerte a jugar. Y si te encuentras con algún problema, recuerda que tienes una comunidad entera dispuesta a ayudarte. Si aún piensas que solo pueden jugar decentemente los usuarios de Microsoft, cambia el chip. Dale una oportunidad a Linux para gaming. Te sorprenderá lo bien que funciona.