¿Por qué mi madre me trata diferente a mis hermanos?

Son muchos los casos de familias de varios hermanos y hermanas, en los que a veces alguno/a ha llegado a preguntarse ¿por qué mi madre me trata diferente a mis hermanos? Estos niños suelen sentir que su madre trata a sus hermanos de una manera especial, mientras que con 'ellos' es más estricta o distante.

Ante todo debes tener en cuenta, que tu caso no es único. Muchas personas pasan por situaciones similares con sus padres, especialmente con sus madres. El trato diferente entre hermanos puede generar sentimientos de tristeza, frustración y hasta rabia que se van acumulando con el tiempo.

Las expectativas que los padres ponen sobre cada hijo suelen ser distintas. Quizás tu madre espera más de ti porque fuiste el primero en nacer, o porque ve en ti un potencial diferente. Esto no justifica el trato desigual, pero ayuda a entender por qué ocurre. Los psicólogos familiares como la Dra. Susan Newman han estudiado cómo estas dinámicas afectan a los hijos durante toda su vida.

Patrones de Crianza y sus Consecuencias

Los padres a menudo repiten patrones de crianza que vivieron en su propia infancia sin darse cuenta. Tu madre podría estar reproduciendo el mismo trato que recibió ella cuando era pequeña. Las investigaciones del Instituto de Familia y Desarrollo muestran que estos ciclos son comunes en muchas familias españolas, donde el favoritismo entre hermanos aparece en 4 de cada 10 hogares.

La forma en que tu madre fue criada influye directamente en cómo te trata a ti y a tus hermanos. Si ella creció en un ambiente donde había preferencias entre hermanos, es probable que inconscientemente esté repitiendo ese patrón. Los expertos en psicología infantil señalan que romper estos ciclos requiere consciencia y esfuerzo por parte de los padres.

Comunicación y Diálogo: Claves para el Cambio

Hablar con tu madre sobre cómo te sientes puede ser el primer paso para mejorar la situación. Escoge un momento tranquilo, cuando ambos estén relajados y dispuestos a escucharse. Expresa tus sentimientos sin acusar - usa frases como "me siento" en lugar de "tú siempre". La terapeuta familiar María Álvarez recomienda este enfoque para abrir canales de comunicación efectivos.

El diálogo honesto puede ayudar a tu madre a ver cosas que quizás no había notado antes. A veces los padres no son conscientes del impacto que sus acciones tienen en sus hijos. Centros de terapia familiar como el Instituto Español de Psicoterapia reportan que cuando las familias hablan abiertamente sobre estos temas, las relaciones mejoran en un 70% de los casos.

Crecimiento Personal y Autoestima

Es importante que no dejes que esta situación defina tu valor como persona. Cada hijo es único y especial, independientemente del trato que reciba. Desarrolla tu autoestima y confía en tus capacidades. Los estudios del Centro de Psicología Aplicada demuestran que mantener una autoestima fuerte ayuda a manejar mejor estas situaciones familiares complejas.

Tu experiencia personal puede convertirse en una oportunidad para crecer y desarrollar mayor empatía. Muchas personas que han pasado por situaciones similares han encontrado formas de fortalecer su carácter y mejorar sus relaciones familiares. Recuerda que tú no eres responsable del comportamiento de tu madre, pero sí puedes elegir cómo responder ante esta situación.

Construyendo un Futuro Mejor

La buena noticia es que las relaciones familiares pueden mejorar con el tiempo y esfuerzo. Muchas familias logran superar estas dificultades mediante terapia familiar, comunicación abierta y comprensión mutua. Organizaciones como la Fundación Española de Psicología Familiar ofrecen recursos y apoyo para familias que enfrentan estos desafíos.

A medida que crezcas y madures, podrás establecer límites saludables y construir una relación más equilibrada con tu madre. No estás solo en este camino - hay profesionales, grupos de apoyo y recursos disponibles para ayudarte. Lo más importante es mantener la esperanza y trabajar activamente en mejorar la situación, sin perder de vista tu propio bienestar emocional.