Filosofia del Zen: Origen e historia
El zen es una de las escuelas más influyentes y conocidas dentro del budismo, de eso no cabe duda. Surgió en China fruto del encuentro con el budismo Mahayana proveniente de la India, para luego expandirse a Vietnam, Corea y Japón. A día de hoy, son millones las personas que practican zazen sentados en posición de loto tratando de alcanzar el estado de satori o iluminación. Pero ¿Te has preguntado alguna vez de dónde proviene esta filosofía que pone tanto énfasis en la meditación? Vamos a verlo.
El budismo se encuentra con China
Todo comenzó cuando monjes budistas de la India llevaron las enseñanzas Mahayana al Reino Medio del siglo I d.C. Allí se mezclaron con el taoísmo, dando lugar a una nueva escuela: el Chán. La palabra es una adaptación del sánscrito dhyāna que significa “meditación”. Así surgió una variante china del budismo caracterizada por la práctica meditativa.
Bodhidharma y el origen del zen
Se atribuye al monje Bodhidharma, o Daruma en japonés, la fundación del zen en China en el siglo VI d.C. Enseñó una forma radical de budismo que enfatizaba la meditación sentada (zazen) para alcanzar una visión trascendental en la propia naturaleza Búdica. Su énfasis en la introspección silenciosa, en lugar del estudio doctrinal, dio forma a esta nueva escuela.
Expansión del zen hacia Japón
En el siglo XII, el zen ya era una fuerza espiritual establecida en China. Fue entonces cuando el monje japonés Eisai lo introdujo a su país después de estudiar en China. Lo promocionó exitosamente entre la élite guerrera del shogunato. Así nació lo que hoy se conoce como zen. Con el tiempo surgieron las dos principales ramas: el Sōtō y el Rinzai, cada una con sus énfasis en koans, meditación sentada y tareas rutinarias.
Ideas centrales
La espina dorsal de la filosofía zen consiste en que la iluminación no proviene de las escrituras, sino de voltear la atención hacia la propia mente para observar la verdadera naturaleza de la existencia. Todo ser posee la capacidad de despertar al entendimiento profundo de que la separación entre sujeto y objeto es una ilusión. Para ello hay que meditar incansablemente hasta experimentar el satori: un destello de visión que disuelve permanentemente la ignorancia mental.
Importancia y legado
El zen ha ejercido una enorme influencia en la cultura oriental y occidental. Ha permeado las artes marciales, la ceremonia del té, la pintura sumi-e, la poesía haiku, los jardines de piedra y todo aquello que ensalza la sensibilidad intuitiva frente al pensamiento racional.
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