El famoso actor cumplió los 78 años rodeado de los continuos escándalos que sacuden a su familia
Ryan O’Neal, una vida «maldita» marcada por los escándalos. El actor fue durante décadas uno de los rostros más populares de Hollywood. Sus inicios en el mundo del boxeo, con una prometedora carrera en la que llegó a conseguir grandes victorias.
Su vida dio un gran vuelco cuando fue elegido para ser uno de los protagonistas de la serie juvenil ‘Peyton Place’. Un auténtico éxito de la televisión en Estados Unidos tras el que el no tardó en dar el salto a la gran pantalla.
‘Dos hombres contra el Oeste’, ‘¿Qué me pasa, doctor?’, ‘Driver’, ‘El cielo debía esperar’, ‘Luna de papel’ o ‘Barry Lyndon’ son algunas de sus cintas más conocidas. Sin embargo es su papel de Oliver Barrett en ‘Love Story’ el que le valdría una nominación a los Premios Oscar en la categoría de Mejor Actor, así como su fama mundial.
La maldición de Ryan O’Neal
Al lado de la guapísima Farrah Fawcett, con quien vivió más de tres décadas de amor, se convirtió en una de las parejas favoritas de Hollywood.
A sus 78 años, Ryan sabe lo que es acariciar el cielo de la ciudad de las estrellas, pero también tocar fondo. Tras unos años imparables, su fama se fue apagando. Un vaivén profesional, que también vivió en lo personal.
Sus tres matrimonios, con Joanna Moore, Leigh Taylor Young y Farrah Fawcett, se vieron siempre ensombrecidos por las supuestas infidelidades.
Su unión más famosa, con la desaparecida Farrah, fue una relación de constantes rupturas y reconciliaciones. Sin dejar de lado la relación de altibajos, ahora parece que están bien, de Ryan con sus cuatro hijos: Tatum, Griffin, Patrick y Redmond.
El abuso de las drogas, accidentes, enfermedades o peleas han marcado la vida de la mayoría de la saga. Precisamente la primera en hablar de la maldición fue su hija, Tatum O’Neal (la actriz más joven en ganar un Oscar con solo 10 años).
La renovación del mito Ryan O’Neal
El actor, muy activo en Instagram, recuperó una fotografía de la película ‘Love Story’ junto a la actriz Ali MacGraw.
Sonada fue la pelea entre O’Neal y Griffin, por un supuesto robo del hijo en casa de sus padres, en la que el vástago terminó con dos dientes menos. Sin olvidar la última detención de Redmond.
Una lista de escándalos que ha crecido en los últimos días. Ryan estaría intentando vender un cuadro que Andy Warhol pintó de Farrah Fawcett y que esta le dejó en herencia.
¿El motivo? Evitar que los más de 20 millones de dólares en los que está valorado caigan en manos de sus problemáticos retoños. A pesar de que él mismo ha reconocido que no fue siempre una persona ejemplar, ahora está centrado en la fundación de lucha contra el cáncer de la actriz de Los Ángeles de Charlie. Además de volver a trabajar en televisión y en la celebración de los 50 años de ‘Love Story’, que se cumplieron este 2020.