¿En el Ramadán se puede beber agua?
Durante el Ramadán, los musulmanes no pueden beber agua mientras dura el ayuno diario. Esto sorprende mucho a mis amigos cuando se lo cuento. El ayuno empieza cada día al amanecer, con la primera oración del día, y termina al atardecer. La abstención de agua forma parte del sawm, que es como llamamos al ayuno en árabe.
La gente me pregunta siempre si en el ramadán se puede beber agua, y si es muy duro no beberla. La verdad es que al principio cuesta, sobre todo en verano cuando hace calor. Pero nuestro cuerpo se adapta poco a poco. Los primeros días son los más difíciles, luego te vas acostumbrando. Los médicos musulmanes recomiendan beber mucha agua durante la noche para mantenerse hidratado durante el día siguiente.
Excepciones al ayuno durante el mes sagrado
Hay personas que no tienen que hacer el ayuno completo. Los niños pequeños, las mujeres embarazadas o que están dando el pecho pueden beber agua. También los enfermos o la gente mayor que podría tener problemas de salud. Mi abuela, por ejemplo, toma su medicación con agua durante el día porque tiene diabetes. Luego recupera esos días de ayuno cuando puede.
Los viajeros también tienen permitido beber agua, aunque muchos prefieren mantener el ayuno si el viaje no es muy largo. Mi hermano trabaja como conductor de autobús y algunos días tiene que hacer rutas largas. Esos días bebe agua para poder conducir seguro y luego recupera el ayuno otro día.
El iftar y la importancia de la hidratación
La ruptura del ayuno se llama iftar. Es un momento muy especial que solemos compartir en familia. Empezamos tomando un dátil y un vaso de agua, siguiendo el ejemplo del Profeta Muhammad. Después ya podemos comer y beber con normalidad hasta el siguiente amanecer. En mi casa siempre preparamos una jarra grande de agua con limón para el iftar.
Mi madre insiste en que bebamos mucha agua durante la noche. Dice que así el cuerpo almacena líquidos para el día siguiente. También tomamos sopas y zumos naturales. Los platos tradicionales del Ramadán suelen llevar muchos vegetales con alto contenido en agua, como pepino y tomate.
Beneficios y aprendizajes del ayuno
El Ramadán no solo trata sobre no comer ni beber. Es un mes para reflexionar y ser más consciente. Cuando pasas sed durante el día, valoras más el agua y piensas en la gente que no tiene acceso a ella. Mi padre siempre dice que el Ramadán nos enseña a ser agradecidos por lo que tenemos.
El ayuno también nos ayuda a entender mejor nuestro cuerpo. Aprendes a distinguir cuando tienes sed de verdad y cuando es solo costumbre. Mi amigo Ahmed, que es médico, explica que el cuerpo humano puede estar sin agua unas horas sin problemas si está bien hidratado. Lo importante es recuperar los líquidos cuando se rompe el ayuno.
Consejos prácticos para el ayuno
En mi mezquita local, el imam da charlas sobre cómo llevar mejor el ayuno. Recomienda evitar el ejercicio intenso y no exponerse mucho al sol. También sugiere ducharse con agua fresca para refrescarse sin tragarla. Mi hermana pequeña usa un spray de agua para refrescarse la cara cuando tiene mucha calor.
Los últimos días de Ramadán suelen ser los más llevaderos. Tu cuerpo ya está adaptado y la mente también. Incluso hay quien dice que se siente con más energía. Al final, es una experiencia que nos une como comunidad y nos hace más fuertes. Cuando llega el Eid al-Fitr, la fiesta que marca el fin del Ramadán, celebramos juntos haber completado otro año de ayuno.
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