Cómo evitar pensamientos negativos

De donde vienen esos pensamientos negativos. A veces son por cosas que nos han pasado o por miedos que tenemos. Otras veces es por la presión que nos ponemos o por compararnos con los demás. Sea cual sea la razón lo importante es saber que no estamos solos. Todo el mundo tiene pensamientos negativos de vez en cuando. La clave está en no dejar que te dominen.
Técnicas para frenar el negativismo
Una cosa que funciona es detectar esos pensamientos a tiempo. En cuanto notes que empiezas a darle vueltas a algo malo párate y pregúntate: ¿Es verdad? ¿Me sirve de algo pensar así? Muchas veces nos montamos películas que no son reales. Si te paras a analizarlo verás que estás exagerando.
Otra técnica interesante es 'cambiar el chip'. En vez de centrarte en lo malo busca algo positivo. Por ejemplo si piensas "soy un desastre" cámbialo por "estoy aprendiendo y mejorando". No se trata de engañarte sino de ver las cosas de forma más equilibrada. Todos tenemos cosas buenas y malas.
El poder de la distracción
A veces lo mejor es dejar de darle vueltas y hacer otra cosa. Sal a dar un paseo llama a un colega o ponte a hacer algo que te guste. La actividad física es genial para esto. Cuando haces deporte tu cerebro se centra en el movimiento y deja de rumiar.
También puedes probar con la meditación o el mindfulness. Sé que suena lo de siempre, pero funciona. Se trata de aprender a observar tus pensamientos sin engancharte a ellos. Es como ver las nubes pasar sin intentar atraparlas. Con práctica te ayuda a no tomarte tan en serio todo lo que pasa por tu cabeza.
Cuidado con las redes sociales, como Instagram y compañía que pueden ser un nido de pensamientos negativos. Vemos las vidas perfectas de los demás y nos sentimos fatal con la nuestra. Pero recuerda que eso es solo lo que la gente quiere mostrar. Nadie sube fotos de sus malos momentos.
Si ves que las redes te bajan el ánimo date un detox. Deja de mirarlas por unos días o limpia tu feed. Sigue solo cuentas que te aporten algo positivo. Y sobre todo no te compares. Cada uno tiene su camino y sus circunstancias.
La importancia del autocuidado
Para evitar los pensamientos negativos es clave cuidarse. Duerme bien come sano y haz ejercicio. Parece una tontería pero cuando estás cansado o a dieta todo se ve peor. También es importante rodearte de gente que te haga sentir bien. Pasa tiempo con tus colegas y tu familia.
Y no te olvides de mimarte un poco. Date caprichos de vez en cuando y haz cosas que te gusten. Puede ser leer un libro darte un baño o ver tu serie favorita. Lo que sea que te haga desconectar y sentirte bien. Recuerda que te lo mereces.
Pide ayuda si lo necesitas
Si ves que no puedes con los pensamientos negativos tú solo no pasa nada. Pedir ayuda no es de débiles sino de listos. Habla con alguien de confianza o busca un profesional. A veces hace falta un empujón para salir del bucle.
Hay un montón de recursos disponibles. Desde terapia tradicional hasta apps de meditación. Lo importante es que encuentres lo que funciona para ti. Y recuerda que cambiar patrones de pensamiento lleva tiempo. No te frustres si no sale a la primera. Con paciencia y práctica lo conseguirás.
Los pensamientos negativos son un claro incordio en nuestra salud mental, pero se pueden manejar. La clave está en pillarlos rápido cambiar el chip y cuidarte. Y si ves que te supera pide ayuda sin miedo. Al final se trata de vivir más a gusto contigo mismo.
Deja una respuesta